El 3 de septiembre del año 2022 entró en vigencia la Ley de Insolvencias en Guatemala. Misma que tiene por objeto regular el régimen de insolvencia que lleve a cabo la reorganización de la deuda, el concurso y si procediere la liquidación de la masa activa.
La reorganización de la deuda tiene como finalidad las recuperación parcial o total de los créditos reconocidos y la oportunidad para el deudor de que continúe con su actividad económica. Dentro de este plan se puede considerar una reorganización financiera, administrativa u operativa.
En el caso del concurso, este deberá solicitarse ante los Juzgados de Primera Instancia del Ramo Civil, del lugar en donde el deudor tenga su centro de operaciones o domicilio, o bien en el lugar en donde el deudor haya tenido su ultimo domicilio. Todo el procedimiento para llevar a cabo el concurso se encuentra regulado en esta ley.
Las normas de esta ley serán aplicables a toda persona individual o jurídica, exceptuando las obligaciones del Estado, las entidades autónomas y la Municipalidades, las cuales se regirán conforme a sus leyes.
La misma tiene como fin lograr una solución oportuna, eficiente e imparcial a una situación de insolvencia por parte de deudor, dándoles como herramientas, planes de reorganización o bien de un proceso justo y equilibrado que brinde seguridad jurídica, buscando con esto lograr que el deudor continúe con su actividad económica y así se logren cumplir las obligaciones con sus acreedores.
Existen varios elementos positivos e importantes, dentro de los cuales se podrían mencionar.
- Opción al empresario de mejorar su situación financiera y mejorar su liquidez.
- Que la ley se aplica en general a personas individuales y jurídicas (siempre con sus excepciones, las cuales la misma ley establece)
- La posibilidad de la reorganización de la empresa
- Un proceso concursal sencillo y bien regulado.
- La categorización de los créditos, de la siguiente manera:
- Créditos privilegiados.
- Créditos comunes
- Créditos de segundo orden.